Época: Imperio Germánico
Inicio: Año 1066
Fin: Año 1150

Antecedente:
El arte románico en el Imperio Germánico

(C) Isidro G. Bango Torviso



Comentario

Un amplio desarrollo de la producción y la comercialización de las obras de metal se va a producir en las tierras del Mosa y del Bajo Rin. Objetos y artistas de estas zonas recorrerán los caminos de Europa difundiendo por todo el orbe cristiano sus característicos productos: aras portátiles, relicarios reproduciendo todo tipo de extremidades del cuerpo humano o hermosas cajas arquitectónicas, o cualquier tipo de instrumentos de culto.
Con el orfebre Rainiero de Huy se consolida un arte del metal que caracterizará toda la producción mosana durante la duodécima centuria. Sus obras, de formas conseguidas de la observación de creaciones antiguas, se muestran influidas por éstas. Un estilo delicado, asombrosamente antiquitizante, le permite crear objetos de una gran hermosura. Su célebre pila bautismal realizada para el abad Hellinus de Notre-Dame-aux-Ports (1107-1118), actualmente en la iglesia de Saint-Barthélemy de Lieja, fue fundida en una sola pieza. Se apoya en los prótomos de doce bueyes, teniendo en su cilindro cinco escenas relativas al bautismo.

El estilo de Rainiero se convirtió en norma estética a seguir por los orfebres del Mosa y del Rin durante todo el románico. Muchas obras, hoy dispersas por iglesias y museos, le han sido arbitrariamente atribuidas, cuando en realidad no son más que la producción de artistas menores influidos por el gran maestro.

En Magdeburgo se crearán series de bronces moldeados. Entre los que ocupan un lugar de honor las puertas de la catedral polaca de Plock, fabricadas entre 1152 y 1154. Su riqueza icónica nos suministra un sinnúmero de personajes relacionados con la obra: el arzobispo Wichmann, el obispo Alejandro de Plock y diferentes donantes y artistas, entre éstos un "Riquinus me fecit" y un colaborador llamado Waismuth. El estilo de estas puertas parece muy cercano al de las puertas de San Zenón de Verona, quedando abierta la incógnita sobre el origen, germano o italiano, de los talleres que ejecutaron ambas obras.

Con la aparición de un artista como Nicolás de Verdún se presenta la ruptura con la tradición románica en la zona: obras como las arcas de Klostemeubourg (1181), la de los Tres Reyes Magos (después de 1181), la de Anno de Siegburg (después de 1183) y la de la Virgen de Tournai (1205) son claras muestras del protogótico germánico.

El progreso en el conocimiento de la técnica del esmalte va a permitir sustituir el oro por el cobre, lo qué facilitará la elaboración de productos más complejos y baratos.

Durante el segundo tercio del siglo XII se producirán en relación con la abadía de Stavelot varias piezas esmaltadas que corresponden a la etapa más madura de este taller. La obra principal de esta serie es el Altar portátil de Stavelot. Se dispone el ara sobre cuatro pies que efigian a los evangelistas, realizados en bronce dorado. Las placas de esmaltes se sitúan en los laterales y alrededor de la piedra. Una iconografía de marcado sentido eucarístico pasional se representa en ellos: arriba, la pasión de Cristo y los tipos veterotestamentarios que la anuncian; en los laterales, los martirios de los apóstoles. La composición de los temas parece corresponder al mismo sentido plástico que existe en las ilustraciones de la Biblia de Floreffe. Desde el punto de vista de la técnica resulta interesante el empleo de líneas de esmalte para la caracterización de las formas.